En misa por Fray Andresito se bendice altar del Templo Recoleta Franciscana

Con ocasión de la misa mensual por la pronta beatificación de Fray Andresito, monseñor Cristian Castro, Obispo Auxiliar de Santiago, bendijo el altar remozado del Templo Recoleta Franciscana tras un tiempo de trabajos de hermoseamiento del histórico templo ubicado en la zona norte de la capital.

Por Enrique Astudillo Baeza, periodista

La misa fue concelebrada por el Ministro Provincial de la Orden, Hermano Carlos Paz, ofm; el Hermano Nicolás Alfaro, ofm, Guardián de la Fraternidad Recoleta Franciscana y por el Hermano Miguel Correa, ofm, Guardián de la Fraternidad San Francisco de la Alameda.

Ejemplo de amor al prójimo

En su homilía, monseñor Cristian Castro, reforzó en primer lugar la trascendencia del Venerable para la sociedad chilena. “Recordamos la figura de Fray Andresito en cada uno de nosotros y la importancia que tiene para la cultura cristiana. De modo particular, por esas dos dimensiones que no están separadas, sino que, al contrario, confluyen en la santidad de una persona: el amor a Jesucristo y el amor a los hermanos”, momento en que también recordó que este 14 de agosto, la Iglesia en el mundo celebra el testimonio de amor a Jesucristo y amor a los hermanos de San Maximiliano Kolbe, como una figura muy valiosa e importante para la vida de la Iglesia contemporánea.

Luego, el Obispo Auxiliar de Santiago, se refirió y reflexionó sobre la importancia de la bendición del remozado altar. “Después del bello hermoseamiento y restauración que ha tenido el templo durante estos últimos tiempos, es muy importante bendecirlo, porque nos comunica mejor con el Señor, nos habla más de su amor; y físicamente nos ayuda a comunicarnos individualmente mejor con Dios, pues representa a Jesucristo en el altar y nos evoca continua y constantemente el sacrificio de Cristo en la cruz”, precisó.

Reglón seguido, exhortó. “Cada vez que podemos entrar en la eucaristía y recibir el Cuerpo y la Sangre de Jesús, también nosotros estamos llamados a ser otros Cristos en medio de nuestros parientes, amigos, vecinos, en medio de nuestra vida cotidiana, y al bendecir nuevamente el altar, estamos reactualizando, renovando nuestro amor por el Señor y nuestra acción a la ofrenda de amor de Dios por nosotros. Ofrenda de amor permanente hacia los demás, hacia Dios y hacia el prójimo y por eso rezamos mucho por Fray Andresito, para que prontamente sea reconocida su sanidad”, expresó el obispo Cristián Castro.

Finalmente, monseñor Cristián Castro, Obispo Auxiliar de Santiago, animó a los presentes a fiarse de Dios por medio de Fray Andresito. “Es fundamental que cada uno de nosotros pueda ver qué es lo más importante dentro de la vida cristiana: que es amar a Dios con todo el corazón, con toda el alma, con todas las fuerzas y amar prójimo como a uno mismo. Es la enseñanza de Jesús, quien también recoge de todo el Antiguo Testamento y lo exalta subiendo a la cruz por todos los hombres, entregando su vida y resucitando”, cerró.

La mesa como encuentro con el Señor

Posterior a la homilía, vino el momento de los signos propios de la bendición del altar, ocasión en que monseñor Cristian Castro, por medio de una oración, bendijo la mesa eucarística. En seguida, vino el momento en que ungió con el santo crisma el altar, para finalizar con el instante en que el obispo reviste el altar, “al cual están todos siempre invitados”, destacó.

Al final de la eucaristía y como es tradición, todos los fieles asistentes se acercaron hasta la tumba de Fray Andresito para rezar la oración universal por su pronta beatificación, así como también, por sus intenciones personales que llevaron hasta el Templo Recoleta Franciscana.